Salimos de La Isla para ver una nueva presentación de Al Di
Meola en Argentina y esta es nuestra reseña
Casi era la hora de inicio del show (20:30) y no solo las
puertas del teatro no se habían abierto sino que Al Di Meola recién bajaba de un auto de
alquiler e intentaba con esfuerzo hacerse paso frente al público que aguardaba en la puerta del
Opera, aunque no logró esquivar a una exaltada fanática que logró arrancarle un
sonoro beso
Así de desprolija (pero con final feliz) fue la organización del show del virtuoso guitarrista
estadounidense la noche del miércoles
Entre dudas y quejas (la noche anterior el músico se había enojado públicamente por el pésimo sonido de su concierto en Uruguay), el show arrancó
finalmente, aunque 45 minutos más tarde, al ingresar Di Meola a la sala,
presentar a sus músicos y explicar la modalidad del espectáculo: canciones de
los Beatles re arregladas, algo de lo más reciente de su propio repertorio y un
infaltable recuerdo para Piazzolla ("como en todos mis shows")
Con un clima intimista y una banda plurinacional (el acordeonista
italiano Fausto Beccalossi, el percusionista húngaro Peter Kaszas y el guitarrista
francés Kevin Seddiki), Di Meola cumplió su promesa brindando logradas
reversiones de temas como Being for the benefit of Mr Kite con destacados
arreglos de acordeón, Because (con armonías flamencas) y A day in the life,
intercaladas con composiciones propias, las cuales se alejan de los complejos
estándares jazzeros para acercarse a la world music, con toques de flamenco y
tango, intensificados por la percusiva manera de tocar la guitarra de Di Meola
Casi dos horas de show con el buen gusto como referente principal,
más allá de géneros y demoras
@aledocarmo
Foto gentileza de Julio Kaplan
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